lunes, 9 de octubre de 2017

¿Quién será el próximo Ángel Berrueta?

El dominó ha seguido su curso y la estrategia de tensión preconizada por Felipe VI El Incendario en su bochornoso discurso grabado a la Nación es ya bien visible, incluso para los "equidistantes". Las calles están llenas de lo peor de la Hezpañolez, esa que nos decían que se había evaporado con los fastos de 1992, y que simplemente seguía donde siempre: agazapada en los bares, en las tiendas, en los colegios, en las familias. En la sociedad española.

En España nunca ha habido, ni lo habrá, ese patriotismo constitucional del que hablaba Habermas porque, a diferencia de la Alemania natal del filósofo, aquí jamás se han tomado ajustes con el pasado nazi-fascista-clerical que está en la base de la legitimidad del actual Régimen: Constitucional en la forma jurídica, pero realmente impuesto con las armas de 1939 y la posguerra que duró una década más, hasta la última cartilla de racionamiento.

Para ese patriotismo constitucional se necesita un pueblo que, por ejemplo, no requiera que todos los años les expliquen el funcionamiento de las campanadas. La falsa modernidad española se asentaba en un indudable progreso económico, pero jamás lo ha hecho en un cambio político-cultural: de ahí vienen todos los males que están aflorando estos días, impulsados de manera plenamente conscientes por la clase política, que piensa que llenando las calles con lo peor de la sociedad van a ganar legitimidad.

Está en cuestión la Sagrada Unidad de la Patria, un tema que escuece a los educados en ese dogma de fe como algo inquebrantable e incuestionable.  El patriotismo español realmente existente no es Constitucional, es la expresión rancia y primaria que consiste en perseguir al que no piensa como uno, y al que se identifica invariableme como la Anti-España, con todo un ramillete de conceptos adheridos como "rojo", "débil" o "diferente".

A lo largo de estos cuarenta años de II Restauración se había conseguido mantener más o menos embotellada a la fiera del nacionalismo español. A base de pan, circo -incluyendo el dopaje de Estado- y libertad sexual, amén de la derrota espectacular del 23-F, ese porcentaje nada desdeñable de la sociedad española ha estado callado o encauzado en el gran catch-all party que es el PP, el partido de la derecha unificada, único ejemplo en Europa occidental, incluso con su nodriza Ciudadanos.

Con la Gran Crisis empezaron a saltar las costuras, especialmente por la vía del pan, y ni siquiera los redoblados esfuerzos para fortalecer los otros dos divertimentos de La Masa han conseguido tener a la fiera domada. Ahora, aprovechando la crisis separatista catalana, tienen vía libre para demostrar su pleno arraigo social, porque ni la Policía les molesta. No son los malos, simplemente son sus nacionalistas.

Es realmente lamentable que en la manifestación unionista de Barcelona ("con 25 grupos políticos adheridos", entre ellos Falange) las imágenes aéreas las tomase la Policía, que no puede tomar bando por ninguna de las partes, pero que lo hace sin que nadie les repruebe.  Recuerden esto cuando todo se desboque aún más, y cuando vayan por ahí buscando las causas del desastre.

Es momento de recordar a Ángel Berrueta. El nombre quizás no le diga nada a nadie, pero merece su pequeño lugar en la Historia de España, al menos la que nos construimos cada uno, en nuestro fuero interno, a base de hechos significativos y detalles fuera del foco. Porque hay fotos que valen mucho más de lo que muestran, y también nombres que traen aparejados situaciones que jamás se deberían olvidar.

El 11 de marzo de 2004 un grupo terrorista islámico atacó en el eslabón más débil de la débil cadena de aliados que se había procurado EE.UU en la guerra de agresión a Irak. Fue un ataque perfectamente planificado contra población civil que usaba medios de transporte público, en absoluto un objetivo militar: buscaban una carnicería, y la lograron en gran medida, porque es muy fácil hacer algo así cuando te mueve el odio religioso.

El Gobierno, que había hecho de su participación en esa guerra una seña de identidad, interpretó rápidamente las consecuencias de haber sido golpeados de esa manera, y en vísperas de unas elecciones generales donde defendía una mayoría absoluta: se enrocó en la explicación más favorable a sus intereses, aunque esa significase enfrentar con mentiras y falsos testimonios a españoles contra españoles. Como ahora.

Insistió tercamente en que el atentado había sido obra de la banda terrorista asentada en el país, cuando jamás habían hecho algo ni siquiera parecido, porque lo más fácil es poner bombas en trenes. Lo hizo hasta tal punto que dictaba los editoriales y portadas de los periódicos, que accedían gustosos a las sugerencias gubernamentales, exactamente como ahora, con la jefa de prensa de Rajoy agradeciendo la Unidad Nacional y Unidad Editorial en torno al desgraciado presidente del Gobierno.

La historia posterior es bien conocida: toda la clase política responsable de aquel desastre acabó quemada y expulsada en el arco de cuatro años, tras una legislatura vergonzosa con insinuaciones ultras sobre los que habían ganado las elecciones. Todos, menos el gallego Rajoy, capaz de sobrevivir aplicando su estrategia de siempre: quedarse quieto, que pase el tiempo. Que ya lo arreglará todo.

Lo que no es tan conocido es lo que pasó en Navarra aquellos días. Dentro de la estrategia de tensión azuzada por los pirómanos de entonces había que "significarse", lo que tarde o temprano nos pedirán también con el actual separatismo catalán. Te empiezan pidiendo que te pongas un pin o un lacito, y después que cuelgues trapos de colores de las fachadas, o que guardes cinco minutos de silencio en la puerta de tu trabajo, so pena de ser señalado como "diferente", "colaboracionista" o "proetarra", la frase favorita de la ultraderecha a lo largo de estos años.

Te empiezan diciendo eso, o directamente pasan por tu comercio para que pongas un cartel con el lema del momento, en aquel 14 de marzo de 2004 era "No al terrorismo, ETA no", hoy podría ser "No al separatismo, Cataluña es España".  Eso le pasó a Ángel Berroeta: la mujer de un Policía había pasado por su panadería para que colgase el trapo votivo, y se negó. Discutió con la mujer. A los pocos minutos, se presentó el marido y le descerrajó cuatro tiros, mientras era jaleado por el hijo común, que lo había acuchillado previamente Vivían en el piso contiguo.

Se conocían, y seguro que conocían las simpatías de cada uno. Lo que le estaban pidiendo al asesinado era que se significase. Se negó, y lo pagó con su vida.  Para mí, otra víctima más del 11-M, pero con la particularidad que se puede considerar perfectamente una víctima de la estrategia de tensión desatada por el partido que azuza el Hezpañolismo llegada la ocasión, y con estos fines.

Se dictó sentencia en un año. Al asesino le cayeron 20 años, al hijo 15 y a la mujer otros 10, como autora ideológica, aunque todos sabemos que la autoría intelectual del asesinato estaba en Madrid. Todos ya están sueltos, porque en este Estado de Derecho con el que algunos se llenan la boca esta gentuza puede campar a sus anchas, en vez de pudrirse de por vida en la cárcel. Porque saben que el Estado de Derecho siempre tendrá un cariñito especial hacia los patriotas comprometidos, cuando debería combatir a todos por igual. A los separatistas, a los terroristas y los ultranacionalistas españoles, que en el fondo son el mismo enemigo.

Ahora, trece años después, estamos en la misma situación. Las hienas que azuzan el Hezpañolismo están enardecidas con las rojigualdas por doquier, y piensan que suman más que los votos depositados en cifras millonarias por los habitantes del territorio desafecto con España. Está al caer un nuevo Ángel Berrueta, y no se sabe si volverá a ser en Pamplona, Valencia o Barcelona. Dirán que fue un accidente o una riña enquistada de hace tiempo. Que no ha sido política. El problema es que la mecha acabará prendiendo, y lo que se presentará como caso aislado puede traer muchos más casos aislados, en la tradición cainita de este país. Ya sabemos quienes llevan las pistolas. Y gran parte del odio.

26 comentarios:

German dijo...

Que bien expresado Sergio. No te sobra ni una coma ni falta ningún punto ni la razón.

Unknown dijo...

Gracias Sergio, ayudando a entender mejor la situación, o por lo menos a ver con más amplitud de miras. Siempre desde un punto de vista global.
Veremos lo que pasa en semanas venideras, pero esto no pinta muy bien, sobre todo para los 'diferentes'...
No se a qué esperas para activar un crowfounding y escribir tranquilo, yo aportaría gustosamente vamos.
eskerrikasko.

Unknown dijo...

Gracias por ayudar a hacer memoria.

Patxi dijo...

Verdades que algunos sabemos, bastantes conocen pero miran para otro lado y la mayoría niega. España, en toda su historia, como siempre.

Anónimo dijo...

La cara de la madre en la foto del post da mucho miedo

Moderado dijo...

SI, o un nuevo Alsasua o similar, yo te llamo etarra hijo de puta, o cabrón catalán, pero con hay ideología detrás, pues se intentará tapar seguro.

Que asco de país, llevo 10 años viviendo fuera de Spain, y me estaba planteando irme unos meses a Cádiz este invierno-primavera, pero me lo voy a pensar mucho.... pic.twitter.com/jVxUSBMzZw

Y lo peor de todo, es que tal vez los moderados en todo esto, es ese 18-22% que vota a podemos, pero que en los medios, siempre sale con la palabra asociada, Extrema, cuando los verdaderos extremos en España son PP-Ciudadanos, incluso a veces PSOE, con criminales de estado como AlFredo el químico, Pepe el Manchego y Felipe el de la Cal.

Unke Bai Ebén dijo...

Creo que lo preocupante es que el porcentaje de gente que no quiere significarse continúa disminuyendo. Como siempre muy acertado Sergio.

Anónimo dijo...

Me alegra ver que ya usas los términos separatismo y separatistas para referirte a los acontecimientos de Cataluña, Sergio.

Antón dijo...

Buenos días, Sergio:

Algunos párrafos de tu artículo me recuerdan esa frase que de vez en cuando utilizas y que viene a significar: esto es atemporal. En este caso,la modificaría por 'aplíquese usted el gobierno que desee':

- "de ahí vienen todos los males que están aflorando estos días, impulsados de manera plenamente conscientes por la clase política, que piensa que llenando las calles con lo peor de la sociedad van a ganar legitimidad." ¿Govern o Gobierno?

- "Ahora, aprovechando la crisis separatista catalana, tienen vía libre para demostrar su pleno arraigo social, porque ni la Policía les molesta. No son los malos, simplemente son sus nacionalistas." ¿Govern o Gobierno?

- "la Policía, que no puede tomar bando por ninguna de las partes, pero que lo hace sin que nadie les repruebe. Recuerden esto cuando todo se desboque aún más, y cuando vayan por ahí buscando las causas del desastre." ¿Govern o Gobierno? ¿Mossos o Policía?

- "Dentro de la estrategia de tensión azuzada por los pirómanos de entonces había que "significarse", lo que tarde o temprano nos pedirán también con el actual separatismo catalán. Te empiezan pidiendo que te pongas un pin o un lacito, y después que cuelgues trapos de colores de las fachadas, o que guardes cinco minutos de silencio en la puerta de tu trabajo, so pena de ser señalado como "diferente", "colaboracionista" o "proetarra"". ¿Govern o Gobierno? ¿Rotulas en catalán o pegas la consigna del Gobierno en tu establecimiento?

- "el Estado de Derecho siempre tendrá un cariñito especial hacia los patriotas comprometidos, cuando debería combatir a todos por igual. A los separatistas, a los terroristas y los ultranacionalistas españoles, que en el fondo son el mismo enemigo." ¿Govern o Gobierno?

¿Casualidad o lo has hecho plenamente consciente de lo que escribías?

Un saludo

Anónimo dijo...

Muy acertado Sergio. Este Hezpañolizmo, viene de muy lejos. En Euskadi lo sabemos bien. Sobre todo esa distorsión continua entre lo vivido y lo narrado en los medios.

Anónimo dijo...

Pues a mí el artículo me ha traído a la memoria a un matarife terminal que ese mismo "Estado de Derecho" trató con un cariñito especial.
Tanto como para pasear cerca de dos años años, de taberna en taberna, su hedionda figura, hasta que por fin se terminó.

Anónimo dijo...

Anton, Sergio tomó partido hace ya mucho tiempo, aunque lo niegue.

Al anónimo de las 4:30: En el País Vasco el hezpañolismo viene ya de hace mucho tiempo sí, como Blas de Lezo (Dile a mis hijos que morí como un buen vasco, armado y defendiendo la integridad de España y del Imperio)

Anónimo dijo...

Coincido contigo totalmente. Y Sergio, no podemos dejar que Twitter y YouTube nos digan lo que pasa en el mundo, y menos al lado de casa. Todo es más complejo y no pareces preocuparte en absoluto de los residentes en Cataluña que no quieren salir de España. Las crisis económicas sacan lo peor de cada uno: los independentistas no quieren repartir, y los subsidiados no quieren que su vida se haga más dura de lo que ya es...

Sergio dijo...

Gracias por vuestros comentarios. Anónimo: Blas de Lezo está de moda, hace diez años ni sabíais quien era. Miguel: ya trataré el tema de los que, siendo catalanes, no quieren la independencia.

Anónimo dijo...

Me encanta la frase "los separatistas no quieren compartir", ni que fuéramos ricos. La mayoría somos trabajadores, curiosamente la mayoría de no independentistas son jubilados y gente que tiene miedo de perder sus paguitas.

Anónimo dijo...

Gracias, Sergio. Hablo desde la distancia y la relativa ignorancia, pero hay cosas que no trago de todo este independentismo... Gracias por elaborar tu punto de vista y traer a este foro (y a Twitter) tanta información relevante. Hace falta más gente como tú siempre, pero especialmente en estas situaciones. Un saludo

Unknown dijo...

Brillante. Ojalá los españoles de bien dedicasen 15 minutos o 1 hora, depende de su capacidad y comprensión lectora, a leer tus dos últimos post en Política Menor.

Sergio dijo...

Tienes parte de razón, sobre todo en que habrá muertos, pero creo que en este caso la mayor responsabilidad no será del gobierno central, sino del catalán. No se si hay algún caso de independencia sin guerra, y eso se oculta. El que de verdad quiera la independencia debe saber lo que costará conseguirla y decidir si está dispuesto a ello, y la parte independentista si que lleva tiempo azuzando las masas y sin contarles toda la verdad.

Feixista dijo...

Resumiendo, que España es muy mala y el nacionalismo catalán o vasco muy demócratas. El pedir privilegios para una región es moderno y pedir la igualdad de todos los españoles es fascista y clerical.

Sergio,aquí hay un grupo de nacionalistas que manipulan las cifras (16.000 millones de supuesto déficit), que manipulan la realidad (las empresas no se irán de Cataluña), que inflan las cifras de heridos (900 heridos, el mayor numero de heridos después de la segunda guerra mundial decían. Eso si, solo dos hospitalizados y uno por un infarto), ... Pero la culpa es de la España franquista, claro...

Hablas también de los grupos de ultraderecha que fueron a la manifestación. Pero no dices que eran una minoría. Tampoco hablas de que en las manifestaciones independentistas van ex miembros de Terra Lliure... Ya sabes, los que a empresarios ponían una bomba en el pecho. Pero esos son respetables.

¿Te parece bien que los derechos entre españoles dependan del lugar de residencia? A mi no. Llámame fascista si quieres. Pero bueno, es normal entre los que opinan que lo de Alsasua fue una pelea de bar :) :)

Eesti dijo...

Sergio, ¿crees que Corea del Norte tiene el vector de lanzamiento para sus misiles nucleares?
Gracias por adelantado y un saludo.

Rafael Ortuño Hinojosa dijo...

¡Todos a la cárcel!

Feixiste dijo...

¿No hay artículos de la organizacion de huelgas generales por parte de antiguos terroristas de Terra Lliure? ¿Nada que decir del fondo en Suiza de Xavier Trias y que el decía que era un montaje de las cloacas del Estado en el documental de Roures de la supuesta operación Cataluña? ¿Nada que decir de como se estaba gastando dinero publico para crear "estructuras de Estado" sin todavía saber el resultado del referendum fraudulento?

Javier G. dijo...

Vaya, me ha dado un poco de verguenza ajena tu comentario, Sergio. A los que tenemos solo 40 anhos y hemos vivido en varios paises por distintas razones, tu post nos puede sonar a puro complejo y defensa de un supuesto "Spain is different", que sinceramente ya huele. Ah, las estupidas cuestiones identitarias que criticas de forma muy dispar, segun la region y tu humor! A ver cuando nos dejamos de complejos y hechos diferenciales, que en Espanha no se hacen las cosas de modo muy distinto al resto de Occidente. Y desde luego el 155 y las manifestaciones se han producido de forma serena y normal. No como en Reino Unido con Irlanda del Norte, ni como en Francia con el centralismo exagerado, por poner dos ejemplos cercanos. Tendran que pasar 2 o 3 generaciones mas para que la gente se olvide Franco y de la mierda de las cuestiones identitarias... Los derechos son individuales y todos los espanholes deberiamos tener los mismos. Lo demas es volver al siglo XIX y al Carlismo, al cual parece que hay varias regiones que quieren volver. Saludos

Anónimo dijo...

Me ha sorprendido tu postura, puesto que te considero bien informado, pero en fin... A la postre seguramente tengas razón, pero al revés:

https://okdiario.com/sociedad/sucesos/2017/12/12/hombre-muerte-cerebral-atacado-zaragoza-llevar-tirantes-bandera-espana-1595899

Saludos.

Anónimo dijo...

¿Víctor Láinez?

https://politica.elpais.com/politica/2017/12/12/actualidad/1513096434_617132.html

En lo primero que he pesando al ver el titular ha sido en esta entrada que hiciste en Octubre.

AlanMenken dijo...

Pues yo he vivido muchos años en dos países diferentes y creo que Sergio lo ha clavado.
5 meses después hay que estar contentos de que un caso tan terrible como éste no ha ocurrido. Y es probable que no ocurra ya. Al menos mientras uno de los dos actores no decida volver a pisar el acelerador a fondo...