Ninguna frase -ninguna- resume el excepcional momento político que se vive en España, donde se están entremezclando problemas muy antiguos con otros que, igual de antiguos, se creían resueltos o aletargados para siempre, y que resulta que están latentes e interaccionando con el detonante de todo: la enésima crisis en la relación del Estado con Cataluña, su región más importante, y donde está la ciudad más importante de la Península Ibérica.
Por tanto, la frase del titular es simplemente un anzuelo para abordar estos días de vértigo absoluto, donde se tambalea el suelo que pisamos y esas libertades y prosperidad que la inmensa mayoría daba por descontando, como si España hubiese abandonado para siempre su historia trágica y su gusto por lo doliente, trucado en mala hora por esa imagen artificial de alegría y palmas. Estamos en la España de siempre, y el tiempo dirá cuanto de espejismo ha habido en estas últimas décadas.
El Gobierno Central interpretó el desafío del referendum del 1 de octubre desde la esclorisis de una Constitución elevada a rango de Texto Sagrado -no se puede tocar, no se puede alterar, hay que adolararla como es, "nosotros los Constitucionalistas"- y desde la mentalidad de siempre de la derecha española: esto es una finca, y los jornaleros vuelven a recoger el algodón después de una buena somanta de palos.
Solo desde la Ley iban a responder a un problema político como el catalán, donde un bloque de fuerzas dispares y con la mayoría en el Parlamento regional fue a las elecciones con un programa muy claro: se decía todo lo explícitamente que permite la Ley que iban a hacer un referendum de autodeterminación. Consiguieron formar Gobierno, y aplicaron su programa electoral.
A pesar de todas las trabas legales y la persecución jurídico-policial, una admirable red social consiguió perpetrar lo que era una soberana bofetada al Estado central: una consulta popular libre, con todas las garantías legales y plena de Derecho, convocada por un Gobierno legítimo a la totalidad de su población. Un acto de desobediencia masiva, que ojalá se hubiese visto en otras ocasiones y con otros temas. De ese día quedan las páginas más honrosas de toda esta triste historia: una sociedad civil que ideó sistemas de todo tipo para poder organizar la consulta, y que burló el aparato estatal en cifras millonarias.
No se podía haber hecho peor por parte de las autoridades centrales. Enrocadas en la solución legal a un conflicto político, solo han llovido amenazas de empapelamientos, y un despliegue policial comparable a un cuerpo expedicionario con ganas de dar un escarmiento. Se llegaron a organizar sesiones de palmas espontáneas cuando las fuerzas represoras salían de sus acuartelamientos hacia la región desafecta, y aupadas a gritos de "A por ellos" que no fueron reprobados por mando alguno. Cuando iban a combatir a otros españoles.
El clima ideal para el ambiente del 1 de octubre, día de la consulta. Como no pudieron impedir su organización -el Ministerio del Interior no capturó ninguna urna en los días previos, reflejo de su poca implantanción en el terreno- e iban presentando como éxito cerrar webs de colegios electorales o la incautación de las tarjetas censales, lo que pasó ese día se puede resumir en una palabra: sabotaje.
Superados en número y misiones encargadas, y traicionados de manera previsible por los Mossos, los comandos de Policía y Guardia Civil desplegados en Cataluña se dedicaron desde primera hora de apertura de los colegios electorales a esa misión: el sabotaje, por vía de llevarse las urnas de las sedes electorales. No identificaban a nadie -eso tenía que haber sido cosa de los Mossos en las horas previas-, e iban con toda la prisa que les dejaba la multitud agolpada para defender su voto, y su derecho a decidir.
Así fueron las primeras horas, que dejaron las imágenes más dramáticas e icónicas. Cuando naufragó todo definitivamente. Con el desastre ya consumado, se dio la orden de ir más tranquilos y la tarde se dedicó a hacer razzias en peligrosísimos pueblos de hasta 200 habitantes, donde las urnas se habían cerrado a primera hora. Eso sí, al caer la noche hubo una foto colectiva y conmemorativa del cuerpo expedicionario acantonado en el ya famoso barco, una foto para la Historia de España, y que hubiese podido tomar Gutiérrez Solana de haber sido fotógrafo. De haber vivido nuestros tiempos, que son los suyos.
¿Qué había que celebrar? ¿Para qué esa foto ignomiosa, después de reprimir de manera desproporcionada una multitud que, de manera milagrosa, no se alteró y no se revolvió contra comandos que en muchos casos superaban en proporción de 100 a 1? ¿Quien está al mando de esa gente, de sobras sabido que son lo más bajo de la sociedad, pero que ni siquiera parecían tener control de sus responsables jerárquicos? ¿Cómo se puede haber permitido algo así?
Cumplían ordenes, ya. ¿Cuales eran las órdenes? Impedir un referendum "ilegal", un referendum que tanto la Vicepresidente del Gobierno tildó como "inexistente" a las 14:00 -tenía el discurso ya preparado, pasase lo que pasase, independientemente del fracaso del sabotaje encargado- y que el Presidente del Gobierno ratificó con los mismos términos a las 22:00. "Inexistente".
Esa era la consigna, transmitida por las bien engrasadas correas de transmisión del Poder Central a sus órganos de propaganda, porque saben perfectamente lo que es un referendum de autodeterminación. Desde aquella cosa llamada Revolución Francesa, todo el poder político -todo- y su autoridad emana del pueblo, de ahí la redundancia de usar la palabra "referendum vinculante": todo referendum es vinculante, porque emana de la única fuente de poder, y cuando este se pronuncia es con una única finalidad. No la de formar Gobierno, no la de dilatar la toma de decisiones en otras instituciones políticas: se vota para decidir sobre un asunto concreto, y se votó todo lo libremente que dejó la labor de sabotaje y hostigamiento de las Autoridades Centrales, perfectamente conocedoras de las implicaciones de una votación de este tipo.
El resultado no podía sorprender a nadie, y en todo caso es "inexistente" para los que se han enrocado en su Texto Sagrado Intocable, ese mismo que proclama la Unidad de la Nación Española como algo eterno, como si fuese una Ley Física. Los promotores del legítimo referendum, siguiendo el plan establecido, aprovecharon los dramáticos acontecimientos para su habitual victimismo -el nacionalismo catalán y sus llantos de fossares, borns y demás camafeos de derrotas- y para convocar una huelga general que ya estaba dentro del plan inicial, pero ahora adornada con "para protestar por la violencia policial". Cuando el Gobierno te llama a la huelga, desconfía, pero ya está lejos la época de cuestionar.
Incluso entonces se podía haber reconducido mínimamente la situación, en mi opinión. Entonces, después de la jornada de huelga, se produjo el acabóse:
Un Rey pirómano
A las seis de la tarde se anunció que el Rey de España, que tiene como funciones establecidas la de garante de la unidad del Estado, iba a dirigirse a la nación. Su padre, en casi cuarenta años de reinado, solo lo hizo en una ocasión fuera del foclkore de la Nochebuena. Hasta entonces, no se había sabido nada suyo, siguiendo la estrategia de "inexistente".
El discurso no pudo ser más desasosegante. Consiguió en diez minutos avivar los rescoldos atávicos de este país, y de una manera inequívoca, y lo hizo con un discurso que podría haber firmado Milosevic o Ratko Mladic veinte años antes. Pasando por encima la brutalidad de la represión, se dirigió a sus leales:
Sé muy bien que en Cataluña también hay mucha preocupación y gran inquietud con la conducta de las autoridades autonómicas. A quienes así lo sienten, les digo que no están solos, ni lo estarán; que tienen todo el apoyo y la solidaridad del resto de los españoles, y la garantía absoluta de nuestro Estado de Derecho en la defensa de su libertad y de sus derechosA quienes así lo sienten. Los sentimientos, eh, y eso que estos eran los legalistas. Los sentimientos: las banderas. Parece que se esté dirigiendo a una minoría que, embolsada en Vukovar, aguarda que lleguen sus correligionarios a salvarles. Sabido es que el Rey en una Monarquía Parlamentaria es un guiñol en manos del Gobierno, y por tanto este editorial de Estado que es un discurso real, lleva la firma del PP.
Podría haber sido un desliz, pero no. Era todo un mensaje a futuro, a la peor de las situaciones. La de españoles enfrentados contra españoles, como tantas veces a lo largo de nuestra historia -esa que los historiadores nos dicen que es perfectamente equiparable a la de otras naciones europeas, como si todas hubiesen tenido cinco guerras civiles en los últimos 200 años-, un discurso repugnante por sus implicaciones.
Así lo supieron interpretar las otras naciones que hay en España, y también el representante de un partido con cinco millones de votos. Lo que empezó como una crisis regional ha derivado a una crisis democrática -la brutalidad policial, la indignidad de celebrar una represión- y ahora es, sencillamente, una crisis de modelo de Estado: el de una Monarquía que no tiende puentes, y el de un Estado incapaz de dar cauce dentro de su Inviolable Texto Sagrado a las naciones que alberga.
Por supuesto, los cortesanos desplegaron la artillería habitual de "se ha ganado la Corona" y demás, pero la impresión generalizada fue de preocupación. No cabía otra cosa diferente que mano dura cuando te quieren segregar una parte de la hacienda, pero el mensaje implícito de dirigirse a minorías españolas acosadas, que era el discurso del PP con los Policías y Guardias Civiles hostigados....
La línea ha seguido hasta hoy, donde la Ministra de Defensa, siguiendo la línea yugoslava, ha dicho que "el Estado de Derecho tiene la obligación de defender a sus ciudadanos", como si estos estuviesen amenazados o acosados por alguien más que no sean las propias fuerzas expedicionarias que se emplearon en el sabotaje del 1-0. Es como si estuviesen hablando a un escenario futuro donde habrá "minorías españolas" en Cataluña. Como si estas no hubiesen podido votar en el referendum "inexistente", o careciesen de los mismo derechos que el resto de ciudadanos.
Un Presidente del Gobierno inexistente
La inacción política del Gobierno Central es lacerante: han recurrido al Aranzadi para frenar un movimiento político, y así estamos. Con la peor crisis democrática en décadas -al margen de la de tracto continuo de la cleptocracia, de la que se han nutrido todas las autoridades ahora enfrentadas-, y sigue en su rol de gallego que no hace nada, que deja correr el tiempo a ver si este vuelve a jugar a su favor. El que se mueve, pierde la oportunidad de volver al lugar donde estaba, o como quieran metaforizar la desesperante manera de concebir el tiempo y el espacio que tienen los gallegos. Si te mueves, no sales en la foto.
Mientras el Parlamento Europeo y el Parlamento Francés han discutido ya la grave crisis catalana, el pontevedrés ha aplazado hasta la semana que viene comparecer en el Congreso español: es la típica manera de concebir el parlamentarismo de la derecha española, que apela a la "unidad de los partidos" pero desprecia el órgano deliberador por excelencia, donde estamos representados todos. La crisis ha servido para mostrar, de manera todavía más evidente, los resortes autoritarios de la derecha: porrazo y escarmiento, persecución judicial, Rey títere, desprecio absoluto por el Parlamento.
Incluso hoy, sometido a una entrevista-masaje de EFE, lo ha llegado a decir explícitamente: "haré lo que tenga que hacer cuando lo tenga que hacer". Como si no se hubiese perdido ya un tiempo vital. Es una persona incapacitada para tantas cosas que entre estas se incluyen el diálogo, o desenrocarse de su postura de ignorar las cosas, como si fuesen a desaparecer por sí solas. Solo ha movido lo del corredor mediterráneo ferroviario, de súbita importancia repentinamente, como si esto se arreglase con caramelitos.
Seguro que está actuando en la sombra, y hablamos sin saber. Baste recordar que cuando Puigdemont fue elegido presidente de la Generalitat, ni siquiera habló con el. Tuvo que ser una broma radiofónica -donde picó, y de donde se deduce que se moría de ganas por hablar- la que revelase esto: siempre se ha negado a hablar, y ahí sigue. Como buen gallego, seguro de que el tiempo le dará la razón. Siempre se la dan, porque viven pensando en la muerte, que es el final del tiempo. Y el que se quede en el mundo, que resuelva los problemas que dejan sin solucionar. Por eso es una de las regiones más atrasadas de Europa occidental.
A futuro
El mandato recibido por la Generalitat es claro: declaración de independencia de Cataluña, bajo la forma de República. Es la misión de las autoridades catalanas, y todos los escenarios que se están manejando, después de haber perdido tanto tiempo, apuntan a que será así. Por eso los discursos desde Madrid hablando a minorías embolsadas. Por eso esa sombra balcánica que es todavía más angustiosa. En este escenario de independencia -que sería cumplir lo que el pueblo ha expresado- se abren múltiples posibilidades.
Cataluña, en contra de toda la propaganda centralista, es viable como Estado independiente. Recibiría el apoyo en el plazo de meses de las otras pequeñas naciones europeas desgajadas en los últimos años, mientras desde Madrid se reirán de ellas, igual que se reían de las "urnas chinas", y todos los escenarios agoreros económicos serían más bien para el conjunto de España, dado que Cataluña es un territorio del que extrae anualmente 16.000 millones de euros.
El problema es lo que quedaría aquí. Quedaría la Hezpañolez que, en efecto rebote del nacionalismo separatista catalán, ha retoñado por el resto del país. Quedaría un Rey que no ha podido impedir la secesión de un territorio y que, como "garante de la Unidad Nacional" no tendría sentido alguno. Ni el, ni su institución. Y quedaría un Gobierno de derechas permanente, galvanizado por tener un enemigo exterior, al menos algo más tangible que la francmasonería.
En cuanto a la izquierda, ni se la ve, ni se la espera. Recuerden que el PP gobierna en minoría, pero nadie se ha planteado derribar a este Gobierno que ha empleado la porra y la represión para un conflicto político. Como para plantearse una reforma Constitucional. Qué digo, si la Constitución no se puede cambiar, es Sagrada y Pluscuamperfecta.
Soluciones
Si se pudiese reconducir la situación, que lo dudo porque son muchos los sentimientos tocados, España debería caminar hacia un modelo federal real, y no el café para todos de la España de las Autonomías, donde La Rioja tiene un parlamento regional. Una Constitución de nuevo cuño, donde se reconozca la especifidad de Cataluña y su derecho a un trato fiscal preferente, como mayor contribuyente del Reino que es.
Que cada autonomía se pague sus vicios con lo que ella misma produce, con un fondo común que no pueda ser una caja opaca de la que hasta hace poco nos ocultaban su contenido -las famosas balanzas fiscales- y donde las instituciones federales-supraautonómicas estén repartidas por toda la geografía, y no solo en Madrid, la capital de un estado centralista.
Pero ya es demasiado tarde. Cataluña se ha ido. Siempre ha mostrado gran desafección por todo lo que afecta al resto del Estado: proclamó la independencia el mismo 14 de abril de 1931, y ahí se tuvo que desplazar parte del Gobierno provisional republicano a calmar los ánimos. Tras aprobar el Estatut, que consumió gran parte de los esfuerzos de la joven República, Azaña dijo el 25 de abril de 1932 en Barcelona: "¡Ya no hay reyes que te declaren la guerra, Cataluña!"
El Rey pasó a llamarse República, y le declaró la guerra en 1934. El Rey pasó a llamarse Caudillo, y retiró las instituciones de autogobierno. El Rey recibió los poderes del Caudillo, y devolvió el autogobierno incluso antes de que hubiese Constitución en España. Nada ha servido, porque en esta historia de sentimientos las cosas estaban rotas desde hace tiempo. Ahora su hijo ha quemado todos los puentes con Cataluña, aporreada y humillada ("el referendum no ha existido"), y que se dispone a irse sola. No encontrarán ninguna otra libertad de las que ya disfrutaban en España, pero nadie puede negar que no tengan razón en intentarlo. No con esta España, que no es la única posible.
Un placer leer de nuevo Política Menor.
ResponderEliminarUna mención especial para esa Juana de Arco lerda a la que rompen 5 dedos, y se venda la mano contraria...
No te has enterado de nada, verdad? Comiendo del pienso te echan los medios y redes sociales, no pienses por ti mismo que duele. Venga.
EliminarGracias por el artículo Sergio, todo lo escrito en Política Menor siempre es muy interesante.
ResponderEliminarCon respecto a lo expuesto en él estoy de acuerdo en bastantes cosas pero creo que hay un poco no tratado que es relevante., y ese es el análisis de los resultados.
Sin entrar a valorar la posible veracidad o no de los resultados emitidos parcialmente por la Generalitat, lo que parece seguro es que la participación no ha tenido la entidad que cabría esperar en un referéndum legal pactado (de nuevo, no entro a valorar la gran dificultad de que eso se llegase a producir). El de Escocia, tan utilizado por la propaganda. tuvo un 85% de participación. En mi opinión de esto emanan dos preguntas importante: ¿por qué no votó un amplio sector de la población? ¿está justificada esa conducta o su inacción los condena a "acatar" el resultado como siempre que alguien se queda en casa en lugar de ir a ejercer su voto?
En los últimos tiempos mi relación con Catalunya ha aumentado bastante y creo que, por lo que he podido percibir, muchísima gente, principalmente partidarios del No (eso hay que reconocerlo) no quiso participar en este referéndum, para ellos carecía por completo de validez y no querían dotarlo de "veracidad" al ir a participar en él. De la misma forma que a los partidarios del sí se les decía que su voto valdría una independencia automática al bando contrario se les decía que no valdría de nada. Estos resultados y este proceso para mi tienen ese gran talón de Aquiles.
Para la segunda pregunta que formulo no tengo respuesta a pesar de llevar tiempo meditando sobre ello. Creo que en mi caso no habría ido a votar porque aun tengo un sentido de legal/ilegal muy rígido e iluso. Pero sí que querría que todo el pueblo de Catalunya pudiera votar en unas elecciones libres y con todas las garantías de seguridad y limpieza para decidir su futuro.
De todo esto solo me ha quedado un poso de tristeza y decepción y una enorme preocupación por los días que han de venir.
Un saludo a todos.
Creo que no incides en las garantías de dicho referéndum -por sabotaje o boicot del Gobierno central, pero tambien porque al no ser "legal" muchos votantes no lo hicieron- son dudosas cuanto menos.
ResponderEliminarDespués, no tengo claro cómo podría afectar a las empresas catalanas (compuestas por ciudadanos) -muchas de las cuales tienen un volumen de ventas importante fuera de Catalunya- a su propia economía y por añadidura, a la del nuevo país. De momento ya están habiendo "fugas" importantes.
También creo que es una posibilidad que se abra una fractura entre los propios catalanes -aunque la actuación policial ha contribuido a aplacarla- y ya veremos si afecta también al resto de España.
¿Podría ocurrir un efecto dominó ya no sólo en España -País Vasco- sino en el resto de Europa (Alemania, Francia, etc.)? ¿Si sucede la declaración unilateral de independencia: enviará Rajoy a los militares? Muchas dudas...
Resulta curioso cómo los
"antidemócratas" y "radicales" de Podemos (para algunos) están siendo los más sensatos en esta grave crisis.
PD. También creo que se debería incidir en el papel de la CUP como catalizador/dinamitador de los sucesos. Hay que tener en cuenta que PDCat + ER + CUP es sólo un matrimonio de conveniencia unidos por un gran objetivo, ¿cuánto tardarán en surgir las tácticas "contra el prójimo"?
Me estas diciendo que tienes un blog de politica y yo sin saberlo?
ResponderEliminarDios!
Sergio, con todo el cariño y el respeto debido, creo que está usted equivocado. Lea -todavía- más Historia, de la pesada, árida y burocrática España, de los "órganos castellanos" y el regionalismo catalán. El dar y el pedir. Vaya más allá de lo obvio, a la vuelta de la esquina de la historia. Levante la vista, reflexione, y lo verá. Usted lo entenderá.
ResponderEliminarY lea menos Twitter.
Un abrazo desde Londres.
Enhorabuena por la entrada.
ResponderEliminarLo acontecido el 1oct. ha reafirmado el movimiento independentista de forma transversal aun más si cabe. El ambiente en general de las manifestaciones era interedad, clases sociales dispares,acomodados y antisistema,...cada uno aportando su granito de arena.
Incluso el NO moderado fue a votar y se está manifestando estos días con una premisa en la boca: "en esta España no quiero vivir".
Saludos desde Bcn.
Un análisis muy acertado, complicado de leer algo así en la prensa de cualquier parte de este Estado cada vez más desintegrado y desafecto a la población.
ResponderEliminarFelicidades por este soberbio post, Sergio.
ResponderEliminarMás allá de la crisis económica, aquí hemos visto en directo como los retales que ataban este "país de países" (eufemismo para no hablar de como una oligarquía radicada en Madrid ha sido ciega, sorda y muda ante los anhelos de las diferentes identidades dentro del país) han saltado por los aires, con las figuras de la monarquía y el PSOE como ejemplo de ello. El rey (o los reyes), otrora una figura poco menos que sacrosanta ha visto como se han ido destapando muchos de sus trapos sucios. El PSOE, que es a fin de cuentas el eje que ha vertebrado España desde los 80 hasta la crisis ha explotado fruto de sus contradicciones internas.
Y mientras todo esto pasaba, gobernaba la derecha con mayoría absoluta. Hablaría de la izquierda, pero es que ha desaparecido del mapa. Donde antes había un frío y sesudo análisis (Marx no era prusiano por nada) ahora hay sentimientos, memes de gatos y un olvido absoluto a la clase trabajadora. Como decía, hemos tenido gobierno de derechas desde 2011, y la derecha española no es una derecha democristiana, socioliberal, etc... como en otros países. La derecha en España es todo eso a la vez, extremadamente agresiva con cualquier opinión que escape de su ideario e incapaz de articular un Estado tan diverso como el nuestro sin usar amenazas ni crear enemigos internos para justificar sus "esto se hace por mis coj*nes". Durante estos años hemos disfrutado del Gobierno más ruin, reaccionario y cobarde de la democracia, y eso es decir mucho.
El otro actor es, claro está, Cataluña. Ese lugar donde en 2011 Mas tenia que entrar al Parlament en helicóptero y en en 2015 aparecía como "la voluntat d'un poble" con un tono mesiánico ciertamente sórdido o donde Oriol Junqueras hablaba sobre la mayor proximidad genética de los catalanes con los franceses que con los españoles. Y todo aderezado con el hecho de que Cataluña, una vez que ETA abandona las armas, pasa a ser el enemigo interno para la derecha que he mencionado anteriormente. Una mezcla maravillosa de agravios por parte del PP, una base teórica del independentismo que está entre el romanticismo alemán y la xenofobia pura y dura, las legitimas aspiraciones a la independencia de una parte de los catalanes viendo en qué se gastan su dinero en otras comunidades, unos argumentos falaces incapaces de mantenerse una vez que todos hemos visto el post-Brexit ("seguiremos en la UE" y demás) y un país con un problema de corrupción propio de otras latitudes, siendo el abono perfecto para todo este circo.
Y con esto en mente llegamos a esta loca semana. No creo que en eso tengo mucho más que añadir a la información del post. Un Presidente que a efectos prácticos es inexistente. Un Ministro de Interior que es un incapaz como pocos más ha habido en su posición (y veníamos de un opusiano de pro) mandando a las FCS como si fuese el ejercito imperial japonés dirigiéndose a Manchuria. Un Rey que en vez de tender puentes los quema... Puf, es que es mucho, eh. Porque el referéndum, guste o no, ha sido un éxito sin paliativos.
Con todo, no creo que los catalanes consigan independizarse. Las carta que tenían era el referéndum y no ha sido el éxito que podría haber sido. Por muchas imágenes de violencia que se hayan visto, no distan mucho de lo que se podido ver en las huelgas de los obreros franceses, sin ir más lejos. La UE ya ha demostrado que bastante tiene con preocuparse de su propia supervivencia y en USA tienen de presidente a uno de los Morancos, con todo lo que esto significa. Si tus apoyos internacionales son los pro-Brexit y ese surtido de partidos de ultraderecha que hay por Europa, mejor no tener apoyos. Ahora Puigdemont está atrapado entre renunciar a la DUI y hacer que la CUP monte en cólera o declarar la independencia y destapar la caja de Pandora que cada siglo se abre en este país, y viendo queeste país vive en un eterno retorno nietzschiano, todo apunta a que va a haber un baño de sangre. Ojalá me equivoque.
Nada más y perdón por semejante ladrillo.
Estoy de acuerdo con el ladrillo, a excepción de una palabra: xenofobia. Soy catalán, 4 abuelos nacidos aquí ( esto aunque no lo parezca es casi imposible en Cat). El sábado fuimos con 4 amigos del centro a dormir a un colegio, pero no fuimos al que nos tocaba votar, no. Fuimos al colegio en la zona más inmigrada de la ciudad, un barrio obrero lleno de gente que se sentía española.
EliminarFuimos allí dispuestos a que nos partiesen la cara para que la gente que quisiera votar lo hiciera, sin importar el quién, de dónde era o lo que iba a votar.
Soy catalan y mira todo lo que padeces tu, lo padezco yo multiplicado por dos, padezco el fascismo de alli y padezco el fascismo de aquí. Estoy deseando que declaren la DUI y que Rajoy haga lo que tenga que hacer, y te lo dice uno que jamas ha votado al PP, pero esta ya harto del fascismo catalán, un fascismo diferente, de lluvia fina pero constante, todos los putos días con lo mismo,no duele, pero te mata lentamente. Una cosa reconozco al fascismo catalán, jamas pensé que llegarían hasta aquí y lo han logrado, lo han hecho realmente muy bien y no descarto que sigan ganando batallas, no descarto que se echen para atrás y no declaren la DUI y venga pelota para adelante y seguir con esta farsa por los años de los años amen.
ResponderEliminarHay otra opcion, pero no hay cojones, referéndum vinculante, eso si, con la ley de claridad del Quebec https://hayderecho.com/2017/07/18/el-derecho-a-decidir-y-las-comarcas-o-por-que-en-quebec-los-independentistas-no-quieren-un-referendum/
En resumen que si la provincia de Barcelona sale el no, se queda en España, que risas me iba a echar con una Catalunya independiente sin Barcelona. Pero no se hara. Rajoy no tiene lo que hay que tener y por supuesto el fascismo catalán no lo aceptaría. Porque esto no va de democracia, va de independencia
Pensar que no hay marcha atras, pensar que, hagas lo que hagas el peor de los futuros es inevitable, es una receta fabulosa para el desastre. Yo si que creo que la situacion se puede enderezar, pero tengo casi nula confianza en Rajoy. La pregunta es, hay alguien con ambicion, y con una vision aceptable por todos?
ResponderEliminarEso a parte, dos cosas. La primera, y menos importante, es el Rey. Que opcion tiene el de la generacion mejor formada? Un Rey que se dirige a la nacion contradiciendo al gobierno democraticamente elegido no es que este redibujando las fronteras de Ejpana, es que mas le vale elegir exilio.
La segunda es que creo que se le da poca importancia a lo que es un referendum de calidad y en condiciones. Creo que esto en en parte lo que puede salvar la situacion. Porque si, se ha votado, y no han sido cuatro gatos, pero cambiar totalmente tu modelo de estado con un 40-y-pico de participacion, por ponerlo fino, no es ideal. En Escocia el referendo fue pactado, con una pregunta pactada, aprobada por una comision neutral aceptada por ambas partes, con condiciones claras y que despues siguio con una campana en condiciones. Al final, con una participacion del 85%, cualquier persona con un minimo de cabeza se daria cuenta de que un resultado de 55-45 significa que queda mucho trabajo por delante.
Creo firmemente que, como consecuencia de ver a medio parlamento enterrando su cabeza cual avestruz constitucional, una proporcion importante de catalanes no voto como protesta, pero sin saber lo que iba a pasar. Ellos, y el resto, se merecen poder ir a votar sin que les apaleen, sabiendo lo que se juegan en la medida de lo posible, de de la forma mas libre posible. Creo que un referendo asi es aceptable por ambas partes, entre otras cosas porque ese resultado no podria ser ignorado por la UE.
Si eso pasase, por cierto, seria interesante ver si algun politico es capaz de responder, con un proyecto y de forma creible, a la pregunta que se hacia el articulo de American Conservative al que enlazabas ayer: Por que ha de seguir Catalunya en Espana?
Por ultimo, y ya puestos a quemar trapos, siempre podemos preguntarnos como reaccionaria el Pais Vasco a una respuesta yugoslava 155 del gobierno central. Porque recuerdo que ETA esta derrotada por el progreso de la via democratica, y los numeros pro-referendum y pro-independencia en el Pais Vasco no son muy diferentes a los de Catalunya.
Me gusta mucho el trato de la parte estatal. Sin embargo, cualquier catalán no independentista, te contará que esto no es, ni mucho menos, la revolución de las sonrisas que quieren hacer creer. Si no estás con ellos, eres apartado, y recuerda mucho a movimientos del pasado que llevaron a grandes problemas.
ResponderEliminarSe han encontrado con un rival perfecto, los unos querían enfrentamiento, los otros también.
Buenos días, necesario, como siempre. Solo una cuestión para este ignorante ¿Qué es el Aranzadi?
ResponderEliminarGracias
la única
ResponderEliminarla única salida razonable pasa por un nuevo referéndum, como el escocés (y ya vamos con 39 años de retraso, en 1978 se tendría que haber votado tanto en Cataluña como en Euskadi si querían formar parte de España, y nos habríamos ahorrado muchos problemas).
muchas gracias Sergio por tu punto de vista, mucho más coherente que la sarta de soflamas interesadas que nos inundan.
ResponderEliminarMuy elocuente análisis de la situación. Da gusto leerte, más allá de la bitácora ciclista.
Muchas gracias Sergio.
* una errata: "el pontevedrés ha aplazado hasta la semana que bien comparecer" ---> " semana que viene comparecer"
Espero que Cataluña se vaya, lejos, muy lejos.
ResponderEliminarUna región autonómica que ha tenido en el poder (votado por la mayoría) al mayor corrupto de la historia reciente de España durante 23 años. En ese tiempo la "dictadura" española cambiaba hasta 3 veces de presidente, de 3 partidos diferentes.
Una región autonómica que tiene un Estatut votado por la amplia mayoría del 35%, con una participación mayoritaria del 48.8%.
Una región autonómica que basa su deseo independentista en una consulta en la que participó el 43% del censo.
Una región en la que gobiernan 3 partidos con una mayoría del 48% de votos.
Que se vayan ya, con su régimen autoritario basado en mentiras y ataques al vecino. Que se vayan ya, con su 3%. Que se vayan, con su democracia, con sus Pujol y sus Correbous.
Que se vayan, si us plau.
En esta ocasión me parece un análisis muy poco ponderado.
ResponderEliminarNo solamente pasas de puntillas por el atropello a las instituciones (las españolas y las catalanas) del Govern catalán, presidido por fanáticos y sectarios de manual. Recordemos a la repugnante presidenta del Parlament cuando formaba parte de la ANC decir que el enemigo era España y los partidos españoles en Cataluña, el vídeo está disponible en Youtube para cualquiera que quiera comprobarlo. Si eso no es lenguaje balcánico que venga Milosevic y lo vea (por cierto, muy desafortunada la comparación con Yugoslavia). Es la misma señora que prostituyó el Parlament para aprobar leyes de manera exprés en cuestión de horas, vulnerando no solo la ley en vigor (de nuevo, la española y también la catalana) sino cualquier procedimiento parlamentario democrático, escupiendo en la cara de una oposición que, no siendo mayoritaria aunque sí numerosa, tiene todo el derecho a tener un debate parlamentario. Una cosa es que la ley no sea suficiente para resolver un problema político y otra cosa es que estos gobernantes, representantes no solo de sus correligionarios sino también de los disidentes, se la estén saltando deliberada y sistemáticamente. ¿Con qué autoridad moral se quiere instaurar un nuevo Estado con estos mimbres, no sólo débiles sino de indudable ilegitimidad democrática? Ya, que solo es votar y "decidir" (como si no hubieran decidido a lo largo de 40 años de democracia mediante sus votos) aunque sea a cualquier precio. Da igual que usemos un censo universal, que podamos imprimir las papeletas en casa, que se recuenten votos en iglesias en plena misa, que se vote en medio de la calle sin ningún control, que haya gente que haya votado hasta 4 veces, que haya más votos que habitantes en muchos municipios. Menudencias si pensamos en la Arcadia Feliz y en la Libertad, conseguida mediante el viejo método "por mis cojones". ¿De verdad se espera que en esas condiciones todos los catalanes se vean interpelados para ir a votar? Una votación viciada de antemano no es un referendum, es una pantomima y una estafa. Que a eso le hayas llamado referendum con garantías y de pleno Derecho no tiene ni siquiera una razonable argumentación, ni por el proceso previo ni por su desarrollo. A ver cómo convencen a las instituciones europeas e internacionales de que eso ha sido una cosa seria y no una broma.
Así que no, no compro el relato de pueblo oprimido ni reprimido (aunque hay que reconocer que lo han vendido bien en muchos sectores de la sociedad no solo catalana sino española). Menos con gente que usa los medios públicos a su antojo; con gente que usa la policía autonómica como policía del régimen (los mismos o más palos se dieron en el 15-M en la Plaza Catalunya); con gente que financia organizaciones privadas tan repugnantes como ANC y Òmnium Cultural al servicio de la Gran Causa (ay si hubiera organizaciones de ese calado a nivel estatal, ¡qué cosas se dirían!), impregnadas capilarmente en miles de eventos sociales perpetuando el discurso del odio y la xenofobia (que si lo español por aquí, que si los charnegos por allá); con gente que usa la educación pública como moldeadora de catalanes "de verdad" (y como lo he vivido en mi entorno tengo argumentos para decirlo alto y claro). Es todo más español de lo que ellos creen en muchos sentidos, y al que no le guste leer esto, mala suerte.
(continúa)
(y sigo)
ResponderEliminarDicho esto, la inacción y dejadez del Gobierno central y nuestro Presidente es absolutamente lamentable. Un ejecutivo incapaz de ver venir algo que le estaban telegrafiando desde hace años, sin capacidad para buscar argumentos políticos y no solo legales, completamente necesarios pero, a la vista está, insuficientes. Sin voluntad ni capacidad para urdir una plan político que haga recapacitar a los ciudadanos que hoy están en las filas del independentismo coyunturalmente por la víscera del sentimiento pero no por la razón. Un ejecutivo que por causa de esa inacción se ve obligado a montar un dispositivo que no valió para nada (si lo haces, que sea en todos los colegios) y que le dio al independentismo la imagen que buscaba, con mucho de verdad y mucho de propaganda despreciable e indecente.
En estas circunstancias, no me extraña demasiado que Puigdemont y Jonqueras insistan tanto en una "mediación" (como si fuera una guerra, qué vergüenza). La votación ha sido un desastre y nadie en la comunidad internacional da el visto bueno al referendum-broma, y eso lo ve hasta el más ciego. Es posible que Puigdemont haga una DUI "soft", al estilo de "desconexión con España" o algún término de neolengua similar. La CUP, huelga decirlo, no pasaría por el aro y podría haber unas nuevas elecciones autonómicas, un escenario posible, probable y nada despreciable bajo mi punto de vista. A eso se agarre el inane Rajoy, a no tener que actuar (porque no sabe y le viene grande el reto) y que los acontecimientos le resuelvan un problema de dimensiones inimaginables.
Muy interesante esta entrada, más que el 99% de cosas que se leen en la prensa. Estoy por lo general bastante de acuerdo y habría muchas cosas que comentar, pero por no aburrir elegiré una. A saber, cuando dices:
ResponderEliminar"Desde aquella cosa llamada Revolución Francesa, todo el poder político -todo- y su autoridad emana del pueblo, de ahí la redundancia de usar la palabra "referendum vinculante": todo referendum es vinculante, porque emana de la única fuente de poder, y cuando este se pronuncia es con una única finalidad".
Sin duda esto es así, pero hay que hacer una matización. Esta concepción de la soberanía absoluta del pueblo ha sido superada en términos jurídicos. Al menos desde después de la 2ª GM, cuando se vio que había que poner cotas al poder de los estados-nación mediante una legislación internacional (todo lo impotente que se quiera, es cierto, pero vigente de facto, y que no ha carecido de utilidad en muchas ocasiones). La legislación internacional, fundamentalmente (pero no sólo) la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948, supraordena jurídicamente las constituciones nacionales, fijando límites sustanciales sobre lo que puede y no puede decidirse (sobre lo que ninguna mayoría puede decidir). Así, ninguna mayoría puede decidir en referéndum violar derechos fundamentales (no digo que este sea el caso de Cataluña, ojo). O de otro modo, que la democracia está limitada constitucionalmente, y que a su vez la constitución está limitada por el derecho internacional. Para estas cuestiones recomiendo mucho leer a Luigi Ferrajoli ("Derechos y garantías. La ley de más débil" es un buen punto de partida).
Una segunda cuestión derivada del fragmento tuyo que cito sería la de determinar quién es ese pueblo del que emanan todos los poderes del estado. ¿Qué pueblo votó en el referéndum del 1-O? ¿Existe el pueblo catalán como sujeto político soberano, capaz de iniciar un proceso constituyente? O de otro modo, si es cierto (como lo es si asumimos la democracia) que es el pueblo la fuente de todo poder político (y en el caso español, "la soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado"), ¿es posible subidivir ese pueblo en diversos pueblos a su vez soberanos? ¿No se perdería entonces la soberanía originaria del pueblo?
Hola Sergio,
ResponderEliminarMuchas gracias por este post. Desconocia esta faceta tuya y como en el ciclismo2005 solo comento off topics, pues este blogg me viene como anillo al dedo. Me considero independentista desde que tengo uso de razon por lo tanto no me considero un interlocutor neutro en este asunto y mucho menos para dar mi opinion que para nada sera neutra, y leyendo algunos comentarios de los que han escrito algunos aqui no me siento comodo ni tengo ninguna intencion de iniciar un debate. Solo queria agradecerte que te atrevas a dar una solucion al problema, pues todo el mundo opina, todo el mundo critica pero a la hora de la verdad no saben mas que decir
"Dialogo" y cuando querias aprofundir un poco mas en esta respuesta, ya se han ido. No creo en un estado federal, ni en Catalunya lo aceptariamos ni en Espanya la casta politica estaria dispuesta a perder tantos cargos y sueldos regionales. Ademas la parte del pueblo espanyol- que se esta mobilizando justo ahora en autobuses para llenar las calles de catalanes de bien el domingo-, tampoco lo aceptaria. El referendum pactado tampoco creo que ocurra, pues seria reconocer que Espanya no es ni una, ni grande ni libre de irte si quieres.
Sergio, la semana que viene me compro algo por wiggle para que sigas escribiendo mas por aqui.
Un saludo
El mejor análisis que se puede leer.
ResponderEliminarHoy por hoy no se puede cambiar el sistema desde dentro, referéndum sí. Y despues para la Corona.
Como vasco: ojalá los catalanes se independicen. Será genial ver qué ocurre a nivel económico. ¿Conseguirán entrar en la Eurozona a medio plazo? Si no lo consiguen, ¿Seguirán con el euro y sin banco central? Y si no es el caso, ¿cuánto se devaluará su moneda, y cuánta inflación habrá?¿Cómo se negocia el pago de la parte proporcional de la deuda española? ¿Qué porcentaje de empresas se irán? ¿Hasta qué punto boicoteará España las relaciones comerciales con Cataluña? ¿Hasta qué punto afectará una ampliación del puerto de Valencia que canalice parte del tráfico de mercancías que hoy en día se hace en Barcelona?
ResponderEliminarTodo el mundo tiene teorías, pero ninguna se parecerá a la realidad. Ojalá los vascos tengamos una referencia válida antes de llegar a la misma situación.
En cuanto al análisis de este artículo, reconozco que suelo estar más de acuerdo con Sergio cuando habla de ciclismo que cuando habla de política. Esta vez no es el caso. En lo esencial, comparto las reflexiones.
Saludos a todos.
Yo, sobre todo, te querría agradecer que hayas sido capaz de ver la dificultad de organizar el referéndum, la solidaridad, la gestión de la organización de tanta gente... Yo nunca he sido independentista y me abruma la presencia constante de banderas en Barcelona, pero lo de la policía y la Guardia Civil me pareció inaudito. Es más, mi único miedo es pensar que todo aquello tan solo fue una prueba por si en un futuro tienen que entrar con los tanques. Porque si no, no lo entiendo. Un referéndum al que le habían quitado cualquier atisbo de legalidad, solo la adquiere por celebrarse en mitad de un clima de violencia, en unas condiciones donde la dignidad de los ciudadanos se convierte en heroicidad. Tras lo ocurrido, me parecía que ya no valía lo de no tener banderas y me tenía que mojar. Sé que luego me arrepentiré si vuelve Mas o cualquier otro ladrón de guante blanco. Pero eso ya será otra historia. Ahora lo importante es alejarse de esta España incapaz de sacudirse sus fantasmas, una España que se reboza en sus tópicos lo mismo para celebrar que para reprimir.
ResponderEliminarPero a la vez también me siento triste y creo que en los próximos días veremos cosas que pensábamos que ya nunca veríamos. Los empresarios catalanes han hablado hoy, pero todavía espero que los empresarios españoles le digan a Rajoy que es mejor dialogar, que allí también hay mucho a perder y que con estas historias nadie gana. Mi única esperanza es la cordura de los números.
Gracias de nuevo por tu artículo, excelente como siempre en el análisis.
A estas alturas no sirve de mucho invocar agravios del pasado. Pero hay algunos datos del texto y de los comentarios que me gustaría comentar:
ResponderEliminar1.- La reforma de la CE: los partidos autodenominados "constitucionalistas" son los que más han contribuido a que no se desarrollase de manera adecuada (y en origen, de un café para todos irracional). Desidia en la reforma del Senado, en financiación autonómica, en la transferencia de según qué competencias, etc. En Euskadi, por ejemplo, según el Gobierno Vasco, hay 35 transferencias pendientes (curiosa situación: + autogobierno vs competencias no transferidas).
2.- Los partidos que han estado en el Gobierno (o los herederos autodeclarados) son los culpables de la degeneración de relevantes órganos constitucionales. Señaladamente, del Tribunal de Cuentas y del Tribunal Constitucional (ya me explicarán cómo pueden llamarse constitucionalistas los que los han deturpado). Por no hablar del poder judicial, aunque es otra cuestión. A pesar de que en reiteradas ocasiones se ha debatido de los fallos del sistema constitucional, o de los aspectos susceptibles de reforma, nadie ha movido un dedo en décadas realmente.
3.- La ausencia de transparencia real en datos y balanzas fiscales, y otros datos objetivos que sirven para diseñar un sistema de financiación justo. Los que se quejan de que la Generalitat provoca un falso debate, deberían reflexionar, porque la oscuridad la provoca la Administración del Estado. Además, la "solidaridad especial" con algunas CCAA, específicamente con Andalucía, condiciona cualquier debate sobre la cuestión.
4.- Lo que pueden perpetrar con el 155 CE: se escuchan barbaridades: i) todo lo puede; ii) se aplica en un día reformando el reglamento del Senado; iii) sirve para suspender o disolver la autonomía. En fin. Poco hay escrito, pero también en la Comisión Constitucional se ve la necesaria mesura a la hora de aplicarlo. Y su diferencia con otros mecanismos más "coercitivos" de otras constituciones de nuestro entorno (como el de la Constitución Italiana). Dentro de la piromanía imperante, a algunos parece que no les importa, para solventar el tema catalán, cargarse el resto del esquema constitucional (en lo institucional y organizativo). Ahora hay muchos catalanes fuera del sistema constitucional. Si deturpan el esquema constitucional justificándose formalmente en una supuesta barra libre (que no es tal) del artículo 155 CE, habrá muchas personas más que estén fuera. Y no me refiero a Cataluña.
5.- La involución que viene: la pedagogía para cambiar el odio existente, los bandos, la repulsa a lo autonómico y al autogobierno, llevará años. Y honestamente, no creo que se produzca. Puede que involucione. Ojalá me equivoque. En 2005, cuando Ibaretxe fue al Congreso, el modelo dio el primer síntoma de agotamiento grave. Con el PP recogiendo firmas por España frente al Estatut, se rompió cualquier posibilidad de reforma futura o de consenso. De hecho, en mi opinión, la quiebra provocada no se limitó a lo estatutario, sino a otras cuestiones laterales, como el tema tregua de ETA, los derechos civiles, etc.
6.- En contra del Estatut de 2006 votaron PP, ERC y la CUP. Esos, diez años después, siguen estando en la misma postura. Al PSOE ni está ni se le espera (aunque puede que hoy nos sorprendan, y Verónica Pérez y Pepe Blanco tengan un apasionado debate sobre el esquema federal en la Ley Fundamental de Bonn). Y el PdCat ha seguido una evolución natural. Rechazan parte del Estatut en el TC, y toman ese rechazo, y la ruptura social general, para tener una nueva razón de ser y unirse al grupo del No en la independencia. Otros actores no plantean un esquema de futuro viable (porque es obvio que el proceso constituyente, entendido como ruptura, no es ni será posible y, por lo tanto, no es una opción).
Muchas gracias por la entrada y el debate, Sergio.
Hola a todos,
ResponderEliminarLa DUI no está suficientemente legitimada por el pueblo catalán, que es el que va a "sufrir" más el impacto de esta secesión. Se puede proponer otro referéndum en Catalunya, sin ninguna represión policial y con al menos un 50% del censo electoral a favor del "Sí" para que la DUI quede legitimada, la decisión es lo suficientemente importante para que así lo requiera. Mientras tanto, ningún país debería reconocer el autogobierno catalán, que sólo es respaldado por el 38,8% del censo electoral según el referéndum del 1-O.
Muy interesante la lectura. Solo un apunte: la revolución francesa trajo más bien la idea de que la soberanía reside en la "nación" más que en el "pueblo", un concepto más bien anglosajón (artículo 3 de la Declaración de los Derechos del Hombre). Es un matiz, pero puede que explique la perspectiva del bando español, que históricamente buscó referentes al otro lado de los Pirineos para reformar sus instituciones. Es probable que ante un problema similar, en Francia se hubiera afrontado de la misma manera que aquí, poniendo el interés de la nación por encima de un movimiento independentista.
ResponderEliminarGracias por el valiente artículo. Es bueno también ver que la mayoría de comentarios, estén de acuerdo o no con lo expuesto, están redactados con cabeza y no ese odio visceral absurdo que tanto estamos viendo.
ResponderEliminarFaltan aliens
ResponderEliminarEfectivamente, la política de Rajoy y el PP, la zafiedad generalizada de la política de "Madrid", la ocupación siniestra del Rey.. todo eso, vale, es real. Pero que al otro "lado" hagas una descripción buenista, ingenua, y de una simpleza solo comparable a la de los discursos de Puigdemont y cia, no me cuadra en tu habitual discurso implacable. Las emociones no deben ser quienes hagan la política, y tu descripción del día del referendum va por ahí. Aquí lo que está claro es que el Govern y sus dos partidos principales, para superar sus fracasos, (y sabemos cuales son, no hace falta que los cuente) y sus estafas, han iniciado un viaje de una irresponsabilidad total para que el ciudadano emotivo (ese que sueña con la independencia desde niño) siga adhiriéndose a ellos olvidando lo real y lo político. Yo estoy a favor de un referendum, de todos los referendum, porque la gente debe dar su opinión, y hacerla valer por encima de sus representantes, pero no desde luego de esta manera. Una palabra sobre, para mí, lo más increíble de todo esto. Los anticapitalistas de la CUP, pactando con la burguesía de toda la vida. Yo no creo en la lucha de las naciones, sino de las clases sociales (que sí, existen, que no todos somos ricos) No creo en las culturas irredentas ni finales. No creo en la religión de los símbolos históricos (de qué historia, cuándo nacieron, volvamos todos al Imperio Romano, a la Tarraconensis, y la Lusitania) porque todos son señuelos de los interesados en hacerse con el poder. Que Cataluña se constituya en Estado me es indiferente, pero no de esta manera, no imponiéndola a quien no la desea en un 50 % al menos (los que votaron a partidos no independentistas).
ResponderEliminarSergio me alegra mucho que continues con Politica menor.
ResponderEliminarYo creo que todo se resume en una cuestión:
-Cuando alguien quiere entrar en una sala donde hay una comunidad que convive, pregunta si puede entrar. Pero para salir no tiene que preguntar a nadie de esa sala si puede hacerlo.
LLevaba tiempo esperando un nuevo post de política menor y la espera ha merecido la pena. Excelente post y gran análisis. Ahora sólo queda esperar que nuestros políticos empiecen a mirar a la sociedad en vez de a sus bolsillos, aunque sinceramente lo dudo (en plan absoluto).
ResponderEliminarY a ver si entienden el concepto de soberanía popular....
It is the economy, stupid que siempre se dice.
ResponderEliminarQuizá el asunto capital de una separación de España sería la deuda. De acuerdo a cifras, aparecidas recientemente en Financial Times a una Cataluña independiente le correspondería una cuarta parte del total de la deuda española, además de su deuda autonómica de la cual dos terceras partes es deuda con el Estado. Habla el periódico británico en total de 319.000 millones de euros de deuda para un nuevo estado (244.000 de su parte en la deuda española, más 75.000 millones de euros autonómica).
Con esas cifras macroeconómicas y el riesgo país que vas a tener lo vas a tener chungo en los mercados. Y además sería en el momento cuando más lo necesitas para financiarte y poner en marcha un nuevo Estado. Ríete tú de la Grecia de la troika y la crisis de la deuda.
Independencia de boquilla sí, pero o tienes a quien te presta els diners u olvídate.
Sergio, donde se puede comprobar tu afirmación " Cataluña es un territorio del que extrae anualmente 16.000 millones de euros."?
ResponderEliminarGracias por vuestros comentarios. Mega.Torpe: aquí, por ejemplo
ResponderEliminarhttps://www.reuters.com/article/us-spain-politics-catalonia-basques-anal/the-basque-country-spains-effective-but-expensive-antidote-to-secession-idUSKBN1CE2G6
"A pesar de todas las trabas legales y la persecución jurídico-policial, una admirable red social consiguió perpetrar lo que era una soberana bofetada al Estado central: una consulta popular libre, con todas las garantías legales y plena de Derecho"
ResponderEliminarBuff, te has pasado varios pueblos, esa "admirable red social" es el resultado de décadas de pujolismo, carretadas y carretadas de millones del erario público e intereses de la burguesía catalana, una revolución de arriba hacia abajo, vamos. La mayoría de los de esa "red social" viven muy bien del procesismo y los restantes son, símplemente hooligans fanatizados y algunos engañados por las milongas que, tú lo sabes bien, tienen un corte supremacista cuasi-ario.
Si es cierto que el PP es bastante inútil, pero es difícil estar a la altura, estos no piensan en otra cosa, son monotemáticos (Vease el preso que pide traslado de celda por la matraca"indepe)
De lo de consulta libre, con todas las garantías legales y plena de derecho, mejor ni hablamos porque te juro que pensé que lo dices ( aún dudo) a modo de experimento para ver qué te contestamos los lectores, y añado que me parece extraño no ver opiniones críticas hacia eso, por cierto.
Un saludo y coincido con algún comentario en que añoro tus post sobre armamento , son muy interesantes.
Juan.